El hamster tenia un vecino que odiaba el era un periquito de pelaje suave y de muchos colores al que odiaba con rabia y despecho como si hubiera hecho un crimen y no le importaba.
De no ser porque en una jaula estaba, que delante de un balcón siempre colgaba.
El hamster,por su parte no sentía por el ave ninguna simpatía e imaginaba un menú exquisito donde sirviera al periquito frito.
La causa de esta guerra entre animales estaba en sus costumbres desiguales por la noche, el periquito se dormía y de día cantaba , en cambio cuando el sol ya se ocultaba el hamster de sus sueños despertaba.
Total que cada uno el compañero dejaba sin dormir el día entero.
¡Cierra ya el pico,pajarraco odio que tu canto no me deje dormir!-dijo el hamster.
¡Tus carreras me tienen amargado y encima nunca vas a ningún lado!-contesto el periquito.
-¡Pájaro idiota!
-¡Roedor majara!
-¡Veras cuando te pille cara a cara!.
Y siempre furibundos y enfadados estaban los dos bichos enjaulados.
Pero un día llego un nuevo inquilino que cambio para siempre sus destinos,un gato negro,grande y malicioso que los miro con ojos muy golosos.
moraleja: no gastes tu tiempo en pelear
porque algún día vendrá otro que es mas
fuerte que tu .
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